Plan General Contable
Índice de contenidos

El Plan General Contable (PGC) es un componente esencial en la gestión financiera de cualquier empresa o entidad. Define las reglas y principios que deben seguirse para la contabilización de las operaciones económicas, así como para la presentación de cuentas anuales. En este blog, exploraremos el Plan General Contable, el proceso de cierre contable, y cómo presentar cuentas anuales de manera efectiva.

1. ¿Qué es el Plan General Contable (PGC)?


El Plan General Contable es un marco normativo elaborado por el Instituto de Contabilidad y Auditoría de Cuentas (ICAC) que establece las reglas contables vigentes y los procedimientos para la preparación de estados financieros en España. Su objetivo es garantizar el cumplimiento de la normativa, proporcionar una estructura coherente y uniforme para la contabilidad financiera de empresas y entidades, lo que facilita la comparación entre ellas, también permite detectar errores y posibles riesgos y por ello la toma de decisiones.

El PGC se compone de una serie de normas y criterios contables que abordan temas como la valoración de activos y pasivos, el reconocimiento de ingresos y gastos, y la presentación de cuentas anuales. Es un plan flexible y que distingue entre los diferentes tipos de empresas existentes. Estas normas se actualizan periódicamente para reflejar los cambios en las prácticas contables y la legislación.

2. El proceso de cierre contable


El cierre contable es un procedimiento que marca el final de un período contable, generalmente un año fiscal por lo que en este momento se cuadran y finalizan las cuentas de la empresa de dicho ejercicio contable. Normalmente los ejercicios contables van desde el 1 de enero hasta el 31 de diciembre, coincidiendo con el final del año natural para así empezar el año contable.Implica una serie de pasos clave para garantizar que los registros contables estén completos y precisos antes de preparar las cuentas anuales. A continuación, se detallan los pasos esenciales en el proceso de cierre contable:

Revisión de asientos: Se realizan ajustes contables para reflejar ingresos y gastos que aún no se han registrado y comprobar que los datos existentes sean correctos y sean fieles a la realidad. como amortizaciones, provisiones, y otros. Estos ajustes son esenciales para obtener una imagen precisa de la situación financiera de la empresa.
Revisión y conciliación de cuentas: Se revisan y concilian todas las cuentas para detectar posibles errores o discrepancias en los registros contables. Esto incluye realizar un arqueo y verificar que los saldos cuadren y que no haya transacciones pendientes sin registrar.
Inventario de existencias: Se debe hacer un recuento de las existencias que sean propiedad de la empresa independientemente de su localización. Para ello es aconsejable llevar un método de inventario permanente para poder controlar las entradas y salidas de material y ser conocedor en cualquier momento de los materiales existentes.
Amortización del inmovilizado: En esta fase se debe cuantificar el coste económico de la pérdida de valor de su inmovilizado material y inmaterial.
Reclasificación de deuda: Para ser conscientes de las deudas que la empresa tiene en el momento del cierre contable hay que realizar una clasificación de la deuda teniendo en cuenta su vencimiento (largo o corto plazo).
Provisiones por insolvencias: Para tener en cuenta gastos extraordinarios se debe hacer una estimación global del riesgo de posibles impagos.
Ajustes de periodificación: En este paso hay que revisar y actualizar las cuentas (480) Gastos Anticipados y (567) Intereses pagados por anticipado que forman el Bloque 5 (Periodificaciones del Activo Corriente), también las cuentas (485) Ingresos anticipados y (568) Intereses cobrados por anticipado que forman el Bloque 6 (Periodificaciones del Pasivo Corriente).
Valoración de activos financieros: Debemos tener en cuenta el valor de los activos que la empresa posee, por lo que deberemos contabilizar todas las acciones que coticen en bolsa como las que no.
Cálculo de resultados: Se calcula el resultado del ejercicio, es decir, el beneficio o pérdida del período. Esto implica restar los gastos de los ingresos y ajustar los impuestos.
Auditoría (si es necesario): En algunos casos, las cuentas anuales pueden requerir una auditoría externa por parte de un auditor certificado. Esto es común en empresas de cierto tamaño o cuando así lo requiere la legislación.
Aprobación y presentación de cuentas anuales: Las cuentas anuales deben ser aprobadas por los órganos competentes de la empresa (junta de accionistas o consejo de administración) antes de presentarlas ante el Registro Mercantil y otros organismos regulatorios.

3. Plazos establecidos para el cierre del ejercicio


Es importante tener en cuenta los plazos establecidos para la correcta legalización de las cuentas anuales. Entre otras, aquí te dejamos las tres más importantes para que las tengas en cuenta a la hora del cierra del ejercicio:

  • Ejercicio contable:  Del 1 de Enero al 31 de Diciembre
  • Presentación cuentas en el Registro Mercantil: Hasta el 31 de Julio
  • Aprobación y publicación en BORME: Hasta el 14 de Agosto

4. Presentación de cuentas anuales


La presentación de cuentas anuales es un requisito legal en la mayoría de los países y es fundamental para la transparencia y la toma de decisiones financieras. En España, las cuentas anuales deben presentarse en el Registro Mercantil dentro de los seis meses siguientes al cierre del ejercicio económico, como podemos ver en el punto anterior. El proceso de presentación implica:

Depósito de cuentas: Se presenta una copia de las cuentas anuales en el Registro Mercantil, junto con otros documentos requeridos, como el informe de gestión y el informe de auditoría (si esta se realizó).
Publicación de cuentas: Las cuentas anuales suelen publicarse en el Boletín Oficial del Registro Mercantil y, en algunos casos, en la página web de la empresa. Esto garantiza la accesibilidad de la información financiera a terceros interesados, como inversores, acreedores y partes interesadas.

¿Quién está obligado a seguir el Plan General Contable?


Todas las empresas y entidades en España, con algunas excepciones específicas, están obligadas a seguir el Plan General Contable en la preparación de sus cuentas anuales.

¿Qué sucede si no se cumplen las normas del PGC?


El incumplimiento de las normas del Plan General Contable puede tener consecuencias legales y financieras, incluyendo sanciones y multas. Además, la falta de cumplimiento puede erosionar la credibilidad financiera y la transparencia de la empresa.

¿Qué diferencia hay entre un cierre contable y un cierre fiscal?


El cierre contable se refiere al proceso de ajustar los registros contables y preparar las cuentas anuales al final de un período contable. El cierre fiscal implica la aplicación de las normas fiscales para calcular los impuestos a pagar.

¿La normativa a aplicar es siempre la misma o hay cambios importantes?


Es importante mantenerse actualizado con las modificaciones del PGC, ya que este se actualiza periódicamente. Consultar con un asesor contable o fiscal es fundamental para cumplir con las últimas regulaciones.

 

El Plan General Contable, el cierre contable y la presentación de cuentas anuales son elementos críticos en la gestión financiera y la transparencia de las empresas y entidades en España. Cumplir con las normas y procedimientos establecidos es fundamental para evitar problemas legales y financieros, y para proporcionar una imagen precisa y confiable de la situación financiera de la entidad. Consultar a un profesional contable o asesor fiscal es clave para asegurarse de que se sigan las normativas actuales y se cumplan todas las obligaciones legales.

Comparte en tu Red Favorita

Envíanos tu pagaré o factura

¿Te llamamos nosotros?

¿Te llamamos?